lunes, 29 de septiembre de 2014

Algo digestivo II

 





¿Esperar a qué?

Estamos tan desprotegidos que nos alimentamos de miserias.




Ayer náuseas.

Hoy vómitos.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

Hora vacía. Sorda,estéril.






Tengo un cuerpo individual que en nada se transforma,
y soy desechable hasta la médula de los huesos.

*
Prefiero el infierno del caos al infierno del orden.
Les divierten libros que no están ilustrados.
Sólo son más amenos por frases especiales
marcadas con la uña o con un lápiz.
*
Hora vacía.
Sorda, estéril.
Fondo de todas las horas.
*
Se me apagaron para siempre un par de estrellas.
Se me hundió en el mar una isla, otra.
Ni siquiera sé exactamente dónde dejé las garras,
quién trae mi piel, quién vive en mi concha.

Salté de mi pellejo, perdí vértebras y piernas,
me alejé de mis sentidos muchísimas veces.

Desde hace mucho cerré mi tercer ojo ante todo esto,
me despedí de todo con la aleta, me encogí de ramas.

Yo misma me sorprendo de mí misma, de lo poco que quedó
      de mí: un individuo aislado, del género humano por ahora,
que sólo perdió su paraguas ayer en el tranvía.


Wislawa Szymborska

miércoles, 3 de septiembre de 2014

El bebé fantasma sueña la vida más allá del útero


Los ratones comían en el rojo y gordo corazón de su pecho, ella estaba distraída con el amor. 

Un murciélago más grande que tu oreja te mira dormir mientras tú sueñas que estás allí.

Acurrucada en un útero oval y azul, los ojos cerrados, una muchacha sueña con su nacimiento. 

La ballena-luna con un solo ojo te ve llorar, empujando mares marrones en un bote pálido.

Todo mezclado pechos pies genitales pezones manos, ambos se quedan dormidos.

Cuerpo bien abierto, piernas negras hacia abajo, ella come la lengua de él sexo blanco helado de crema.

Pequeña Dama-Corazón de alas rosadas vacila, piernas rosa-coño abiertas cerca de su pito negro y duro.

Muerte y fama, Allen Ginsberg

martes, 2 de septiembre de 2014

Algo digestivo I


Duele este cuerpo y estas manos.
Duele este abismo.
Todos tenemos miedo. Todos estamos aquí.