jueves, 20 de noviembre de 2014

Yo no sé decir la muerte de los otros



 

Antonio Vega: Tu voz entre otras mil

aquí el audiovisual.


Yo no sé decir la muerte de los otros. Sé llorar 
sin sílabas, noctambular en la desnoche, 
exiliarme de mi sombra, de tu voz, de la sangre 
de tus dedos. Puedo eyacular tristezas y delirios, 
respirar tu nuca, fracturar y masticar mis huesos. 
Sé beberme los horrores del ensueño, los 
orines de la tarde, los fluidos más espesos de 
este cuerpo dolorido y mutilado. He aprendido 
el ritmo del insomnio, su vaivén, su luz tormento. 
He tenido orgasmos cieguísima de ti, 
tristísima de mí, solísima. Mas yo no sé decir 
la muerte de los otros, no con lo infecundo 
de mi vientre, no desde el aborto de mi tumba.

Plegarias para insomnes, Daniela Camacho


martes, 18 de noviembre de 2014

Como un marinero,ahogado. (Tres fragmentos de Virginia Woolf)





Ginger and Rosa



No estar nunca del todo contenta,del todo segura, porque, en cualquier momento, la bestia se revolvería, aquel odio que, especialmente desde su enfermedad, conseguía que se sintiera arañada, herida en la columna vertebral, conseguía que le doliera el cuerpo y lograba que toda satisfacción provocada por la belleza, la amistad, por sentirse bien,por ser amada y tener un hogar agradable se tambaleara, se estremeciera y se doblegara como si de hecho hubiera un monstruo arrancándole las raíces.

Basta la rigidez del esqueleto de la costumbre para sostener la estructura humana. Donde no hay nada, el sentimiento se ahueca, completamente vacío por dentro.

Lo llamaba naturaleza muerta. Luego venían las visiones. Se había ahogado, decía, y estaba tumbado en una colina con la gaviotas chirriando por encima de él.


(La señora Dalloway, Virginia Woolf)

viernes, 14 de noviembre de 2014

Examen a la puerta del útero


Buscaba un hogar.
Tanteó rostros distraídos, por ejemplo, el rostro
de una mujer que se sacaba un niño de entre las piernas.

(…) Pero las moscas 
las moscas se elevan en nube.

Ted Hughes


miércoles, 5 de noviembre de 2014

Alba Sedmikrasky o Adiós Reina Mia o Hiroshima Mon Amour




Célula microscópica en el lienzo (...) 
eres sangre que brota de la montaña.

Infortunio empolvado de minerales vírgenes
jardín de las delicias con flores negras
que trepan por las raíces de este árbol cadáver.  

Alba Sedmikrasky


(adiós reina mía)